Apocalipsis 17, los siete reyes
Entonces vino uno de los siete Ángeles que llevaban las siete copas y me habló: «Ven, que te voy a mostrar el juicio de la célebre Ramera, que se sienta sobre grandes aguas, con ella fornicaron los reyes de la tierra, y los habitantes de la tierra se embriagaron con el vino de su prostitución.»
Te voy a mostrar el juicio del Vaticano, que se sienta sobre grandes multitudes, con el se unieron los mandatarios de la tierra, y los habitantes de la tierra se creyeron sus farsas y engaños, tanto que creen que van a ir al cielo sin ser uno con Dios.
Me trasladó en espíritu al desierto. Y vi una mujer, sentada sobre una Bestia de color escarlata, cubierta de títulos blasfemos; la Bestia tenía siete cabezas y diez cuernos.
Y vi al Vaticano, sentado sobre el Papa, en la "Mitra" que se pone en la cabeza lleva el título blasfemo de vicario del hijo de Dios (VICARIVS FILII DEI); los Papas eran siete y en diez partes estaba repartido el mundo.
Tomando las letras como números romanos dan:
VICARIVS = 112. (V=5, I=1, C=100, A=0, R=0, I=1, V=5, S=0).
FILII = 053. (F=0, I=1, L=50, I=1, I=1).
DEI = 501. (D=500, E=0, I=1).
112 + 53 + 501 = 666. El número de la bestia.
La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, resplandecía de oro, piedras preciosas y perlas; llevaba en su mano una copa de oro llena de abominaciones, y también las impurezas de su prostitución, y en su frente un nombre escrito "un misterio": «La Gran Babilonia, la madre de las rameras y de las abominaciones de la tierra.»
El Vaticano estaba formado por el Papa y los cardenales, llena de tesoros; en el banco Vaticano lleno de abominaciones y también las empresas que van contra el dogma y de las que son propietarias, y en su frente un nombre escrito: “Abominación”.
Y vi que la mujer se embriagaba con la sangre de los santos y con la sangre de los mártires de Jesús. Y me asombré grandemente al verla; pero el Ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Voy a explicarte el misterio de la mujer y de la Bestia que la lleva, la que tiene siete cabezas y diez cuernos.
Y vi que el Vaticano se embriagaba con la sangre de los santos y de los mártires. Y me asombré grandemente al verla; pero el ángel me dijo: ¿Por qué te asombras? Voy a explicarte el misterio del Vaticano y el Papa que lo lleva, que son siete Papas y quieren dividir el mundo en diez partes bajo su mandato.
La Bestia que has visto, era y ya no es; y va a subir del Abismo pero camina hacia su destrucción. Los habitantes de la tierra, cuyo nombre no fue inscrito desde la creación del mundo en el libro de la vida, se maravillarán al ver que la Bestia era y ya no es, pero que reaparecerá.
La bestia que has visto, (el Papa), era en el principio y ya no es, (está en el averno); y va a subir del abismo pero camina hacia su destrucción. Los habitantes de la tierra que no sean uno con Dios, se maravillarán al ver que el demonio reaparecerá.
Aquí es donde se requiere inteligencia, tener sabiduría. Las siete cabezas son siete colinas sobre las que se asienta la mujer. Son también siete reyes: cinco han caído, uno es, y el otro no ha llegado aún. Y cuando llegue, habrá de durar poco tiempo. Y la Bestia, que era y ya no es, hace el octavo, pero es uno de los siete; y camina hacia su destrucción.
Las siete cabezas son siete colinas sobre las que se asienta el Vaticano. Son también siete Papas desde que el Vaticano es estado: cinco han caído, (Pio XII, Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II), uno es, (Benedicto XVI), y el otro no ha llegado aún, (Francisco). Y cuando llegue, habrá de durar poco tiempo. Y el Papa, que era y ya no es, (Benedicto XVI), hace el octavo, pero es uno de los siete; y camina hacia su destrucción.
Los diez cuernos que has visto son diez reyes que no han recibido aún el reino; pero recibirán con la Bestia la potestad real, sólo por una hora.
Están todos de acuerdo en entregar a la Bestia el poder y la potestad que ellos tienen.
Los diez cuernos que has visto son diez mandatarios que aún no han recibido aún la participación del mundo. (El mundo se repartirá en diez trozos); pero recibirán del Papa el beneplácito por un año.
Están todos de acuerdo en la religión única y le ceden el poder y la potestad que tienen.
Estos harán la guerra al Cordero, pero el Cordero, como es Señor de Señores y Rey de Reyes, los vencerá en unión con los suyos, los llamados y elegidos y fieles.»
Perseguirán a los que no piensan como ellos, pero acaecerá la segunda venida de Jesús y los vencerá.
Me dijo además: Las aguas que has visto, donde está sentada la Ramera, son pueblos, muchedumbres, naciones y lenguas. Y los diez cuernos que has visto y la Bestia, van a aborrecer a la Ramera; la dejarán sola y desnuda, comerán sus carnes y la consumirán por el fuego; porque Dios les ha inspirado la resolución de ejecutar su propio plan, y de ponerse de acuerdo en entregar la soberanía que tienen a la Bestia hasta que se cumplan las palabras de Dios.
Los diez mandatarios y el Papa se volverán contra el Vaticano, lo debastarán.
Y la mujer que has visto es la Gran Ciudad, la que tiene la soberanía sobre los reyes de la tierra.
Y la mujer que has visto es la gran ciudad, el Vaticano.